Bienvenidos una vez más al fin de semana de Obtentalia. Esperamos que los contenidos de este fin de semana os distraigan y también os hagan pensar un poco. Nosotros sólo proponemos, lo demás es elaboración vuestra.
Antes de hablaros de contenidos queríamos contaros lo que nos hizo pensar anoche la visión del cielo, tan nítido y estrellado. Parecía que podíamos tocarlo con la mano, como si las distancias fueran una ilusión, pero más bien al contrario, la ilusión era nuestra propia percepción. Y es que las distancias astronómicas son ingentes y en muchos casos inimaginables.
Antes de hablaros de contenidos queríamos contaros lo que nos hizo pensar anoche la visión del cielo, tan nítido y estrellado. Parecía que podíamos tocarlo con la mano, como si las distancias fueran una ilusión, pero más bien al contrario, la ilusión era nuestra propia percepción. Y es que las distancias astronómicas son ingentes y en muchos casos inimaginables.
Se nos ocurren dos ejemplos. El primero muy cercano. El objeto astronómico más cerca de la Tierra es la Luna. Su distancia no es fija, pero su variabilidad tampoco es muy acusada, así que podemos tomar un valor medio, alrededor de (385.000 kilómetros). Ahora imaginemos que tenemos un automóvil deportivo y que salimos desde la Tierra hacia la Luna en línea recta, a una velocidad constante de 200 kilómetros por hora. No es la velocidad máxima que alcanza un "Fórmula 1" pero es una más que aceptable velocidad de crucero para un viaje en coche. ¿Cuánto os imagináis que tardaríamos en llegar?, ¿horas?, ¿días?, ¿meses? Más de dos
meses y medio, no llegaría a tres. ¡Y es el objeto más cercano al que podemos ir!
El segundo ejemplo es también cercano, aunque no tanto. Nuestra vecina galáctica, Alfa Centauri, es la estrella más cercana a nosotros (aproximadamente 4,2 años luz). Llegar a ella en nuestro deportivo a 200 kilómetros por hora nos llevaría ... aproximadamente 8.750 millones de años, casi el doble de la edad que tiene nuestro planeta Tierra (4.500 millones de años, aproximadamente). En las naves espaciales más rápidas de que dispone el hombre tardaríamos en llegar a Alfa Centauri unos 60.000 años. ¡Y la tenemos ahí al lado!
¡Qué decir de las distancias entre galaxias, o entre grupos de galaxias! Ahí ya se pierde el sentido de la distancia.
Y volviendo a lo más cercano, a Obtentalia en nuestro caso, hoy no podéis perderos lo que nos cuenta Pólux. No tiene nada que ver con filosofía, ni religión ni con cuestiones trascendentes. Nos cuenta cuatro casos reales en los que se interpreta una orden o una indicación tan literalmente que lo que se hace para cumplirla es ... digamos poco ortodoxo por llamarlo de alguna manera. Se titula "Órdenes demasiado literales". Lo tenéis tras esta entrada y en su página.
Mañana intentaremos poder presentaros una canción algo especial de Orfeo. Llevamos ya tiempo detrás de él para que nos deje presentarla en Obtentalia. De hecho nos gusta tanto que se la regale a Obtentalia y le ponga ese nombre. Pero no sabemos bien por qué no acaba de parecerle bien. Mañana sabremos finalmente si accede o no.
Justo hace un año hablábamos de la posible sintonía de Obtentalia. Mañana diremos algo más sobre esto. Mientras podéis ver lo que escribíamos sobre eso en "Hace un año ..."
Y como fotografía de cabecera, y para relajarnos un poco, os dejamos la de una playa tranquila y solitaria, justo lo contrario de cómo estarán las playas este fin de semana.
Hasta mañana, si el tren que siempre nos trae quiere de nuevo hacer el trayecto.
Y volviendo a lo más cercano, a Obtentalia en nuestro caso, hoy no podéis perderos lo que nos cuenta Pólux. No tiene nada que ver con filosofía, ni religión ni con cuestiones trascendentes. Nos cuenta cuatro casos reales en los que se interpreta una orden o una indicación tan literalmente que lo que se hace para cumplirla es ... digamos poco ortodoxo por llamarlo de alguna manera. Se titula "Órdenes demasiado literales". Lo tenéis tras esta entrada y en su página.
Mañana intentaremos poder presentaros una canción algo especial de Orfeo. Llevamos ya tiempo detrás de él para que nos deje presentarla en Obtentalia. De hecho nos gusta tanto que se la regale a Obtentalia y le ponga ese nombre. Pero no sabemos bien por qué no acaba de parecerle bien. Mañana sabremos finalmente si accede o no.
Justo hace un año hablábamos de la posible sintonía de Obtentalia. Mañana diremos algo más sobre esto. Mientras podéis ver lo que escribíamos sobre eso en "Hace un año ..."
Y como fotografía de cabecera, y para relajarnos un poco, os dejamos la de una playa tranquila y solitaria, justo lo contrario de cómo estarán las playas este fin de semana.
Hasta mañana, si el tren que siempre nos trae quiere de nuevo hacer el trayecto.
Por Cástor y Pólux.
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