INTRODUCCIÓN. BREVE HISTORIA DE NUESTRO BLOG.

Pólux ha preparado una breve historia de nuestro blog. Breve porque no se extiende mucho en detallarla y sobre todo porque breve es en el tiempo la andadura de Obtentalia. La podréis leer tras esta introducción (a golpe de ratón como nos gusta decir) y en una página nueva que abriremos para alojarla que titularemos “Historia de Obtentalia”, para con el tiempo poder ir ampliándola y actualizándola.

Podemos decir que nos sentimos satisfechos con lo logrado hasta ahora, el número de visitas recibidas, la participación de los colaboradores y el nivel alcanzado por ellos… Pero aún así, reconocemos que hay personas de valía y con criterio, que nos gustaría colaboraran, que no creen en este proyecto, por otro lado cosa normal y aceptable, pues a todos no les puede gustar lo mismo.

Nuestro interés es continuar, aunque tenemos que decir que no es tan fácil como pudiera parecer a simple vista, a veces el interés y las ganas no bastan para hacerlo.

En nuestra atalaya tenemos tiempo para reflexionar sobre todo ello. El final de nuestra estancia en estos acantilados que miran al Atlántico comienza a estar más cercano que lejano, y así lo asumiremos cuando llegue el día, que será triste como todo final e ilusionante como todo comienzo.

       Mañana domingo, como hemos venido diciendo estos días, tendremos otra historia de El Argonauta, sobre un tema distinto a los que ha tratado hasta ahora, la ayuda a los indigentes de nuestra propia ciudad, gente cercana y olvidada. Mañana os lo presentaremos con más detalle.

Como ya habréis podido observar disponemos de un nuevo diseño en la cabecera del blog, el del nombre de Obtentalia. Nos lo ha regalado un buen amigo. Esperamos que os guste. Hemos reordenado un poco las páginas que constan en el lateral izquierdo, agrupando los únicos artículos que escribieron Calíope y El Porquerizo de Agamenón (en espera de su reincorporación como colaboradores de Obtentalia) bajo el nombre "OTRAS COLABORACIONES".

Buen fin de semana.

Por Cástor y Pólux.

BREVE HISTORIA DE NUESTRO BLOG, por Pólux.

BREVE HISTORIA DE NUESTRO BLOG.

Por Pólux (22-09-2012).

Aquí tenéis la historia de nuestro blog Obtentalia, aún un bebé, pues tenemos poco más de cinco meses de historia, en realidad algo menos como ahora veremos.

A principios de este año 2012 Cástor y Pólux, hermanos en la mitología y hermanos en la realidad andábamos sumidos en otras cuestiones. Teníamos ganas de hacer algo distinto que además nos aportara conocimiento, perspectivas futuras ... Y optamos por iniciarnos con un blog. Dado nuestro desconocimiento nos asesoramos con personas que ya estaban en este mundo funcionando, buscamos un nombre, compramos el dominio (no sabemos hasta donde podemos llegar), preparamos los correos con los que funciona Obtentalia y comenzamos nuestra andadura

Empezamos a ser visibles en Internet el 14 de marzo de este año 2012. En realidad sólo se trataban de pruebas para adquirir algo de experiencia y conocimientos sobre el funcionamiento del blog, pues hasta entonces se reducían a cero.

En el mes de abril siguiente pusimos algún artículo de prueba y empezamos a contactar con nuestros colaboradores. Pero no fue hasta el día 5 de mayo de 2012 cuando empezamos a funcionar a pleno rendimiento, es decir, realizando al menos una entrada diaria, a la que llamamos introducción, y colocando en la cabecera una foto también diariamente.

Todas las fotografías han sido realizadas por nosotros. Tan sólo creemos recordar que en una ocasión pusimos una foto que no lo era, pues íbamos a comentar algo sobre la Luna y no teníamos una foto nuestra que tuviera la calidad suficiente para ilustrarlo, así que la tomamos de algún sitio. Salvo en esa ocasión, hasta ahora las fotos de la cabecera son originales de nuestra modesta cámara compacta (que a veces parece que hace maravillas para lo que es).

Los colaboradores que han publicado hasta ahora son los siguientes:

HERMES: el primer colaborador (aparte de los fundadores) en participar, escribe unas crónicas con un estilo muy depurado y perfeccionista.

PERSEO: lo recordaréis por el humor sano de su personaje “Periquito”.

MINERVA: nos presenta fotos y reportajes de nuestra modelo, la modelo de Obtentalia, nuestra querida María.

CALÍOPE: nos brindó un artículo de actualidad que levantó pasiones. Actualmente está en la “reserva”.

HELENA DE TROYA: desgrana el difícil tema de las malas relaciones familiares. Ha escrito también alguna introducción y algún comentario junto a Pólux.

EL PORQUERIZO DE AGAMENÓN: colaboró con una exposición sobre el difícil tema del sentido de la vida y de la muerte. Actualmente estamos a la espera de que puede reintegrarse a la plantilla de colaboradores.

ORFEO: pone la nota musical en Obtentalia con sus composiciones originales, presentadas en exclusiva en nuestro blog.

ARGONAUTA: el último en incorporarse y uno de nuestros colaboradores más prolíficos, ha tocado temas variados basados en sus experiencias personales, muchas de ellas relacionadas con su condición de piloto aéreo. Muy exhaustivo a la hora de profundizar en los temas que así lo requieren, su estilo ágil y ameno ha sido reconocido por una publicación internacional. Es, junto a Pólux, el colaborador más leído.

CÁSTOR: cofundador de Obtentalia, firma las introducciones diarias junto con Pólux y redactó los primeros artículos con los que nuestro blog vio la luz.

PÓLUX: cofundador de Obtentalia, firma las introducciones diarias junto con Cástor. Colabora asiduamente con temas preferentemente humanistas y filosóficos. Es, junto a Argonauta, el colaborador más leído.

Hicimos la primera comida de Obtentalia, a la que sólo pudieron asistir algunos colaboradores, pero que recordamos con cariño, pues fue amena y divertida. En su día la referimos en el blog. Nos gustaría repetirla cada cierto tiempo y convertirla en costumbre, pero vayamos poco a poco.

El día 22 de agosto de 2012 cambiamos la plantilla que veníamos utilizando para el blog por la actual, todo un acierto a decir de nuestros visitantes, y hace pocos días cambiamos el diseño de la palabra Obtentalia con la que se inicia el blog.

Y así continuamos, a veces con muchas ganas e ilusión por hacer crecer Obtentalia, otras desilusionados y a punto de tirar la toalla y de cerrar este blog, pero … algo nos empuja a seguir.

Nuestro deseo es disponer de un blog activo, donde al menos tengamos una entrada (introducción) y una foto de cabecera nuevos cada día, y siempre que se pueda artículos de colaboradores. Puede parecer que la introducción y la foto no son mucho, y tal vez no lo sean, pero para nosotros requiere en muchas ocasiones hacer un esfuerzo para disponer de un tiempo que no tenemos. Y las ideas que vertimos, por simple que sean en ocasiones, hay que pensarlas. Todo eso nos lleva a cuestionarnos en ocasiones la razón de todo esto, por qué hacer Obtentalia. ¿Realmente merece la pena?, ¿tenemos algo que decir?, ¿a alguien que no seamos nosotros le interesa lo que decimos? No queremos un blog más, nuestro objetivo está mucho más allá, y vemos que cuesta alcanzarlo. Los colaboradores son un gran apoyo. Sin ellos no habríamos llegado donde estamos, pero para el camino que nos queda, aún falta algo que no hemos conseguido...

Nuestra intención es seguir aquí, día tras día, mientras lo permita el tiempo, los medios técnicos, las ideas y vosotros, seguidores de Obtentalia.

INTRODUCCIÓN. PASEANDO ENTRE MUERTOS.

Qué lugares más tranquilos son los cementerios, siempre y  cuando no sea día de afluencia masiva de gente. Casi siempre lejos de los núcleos urbanos,  su silencio y su imperturbable apariencia invitan al paseo y la reflexión.

Paseando entre sus muros nos sentimos como en casa, cercanos a lo único seguro que tenemos en esta vida, que la perderemos.

No es una cuestión más que de estadística observar como con el paso de los años va habiendo más personas conocidas descansando en sus nichos que fuera de ellos. A pesar de ello, y de la tristeza que pueda producirnos recordar a algún ser querido, pasear por sus calles de tierra o cemento tiene algo que reconforta.

La soledad de los nichos no es soledad, es ausencia. La soledad sólo la sienten los vivos. En los cementerios sólo hay vivos paseando, los muertos hace mucho que ya no están, se fueron el día que dejaron de estar entre los vivos. En los nichos no hay más que recuerdos, los recuerdos de los vivos.

Mañana sábado Pólux nos contará la historia de Obtentalia, el tiempo que llevamos funcionando, todos los que han colaborado en alguna ocasión, y las ilusiones y desilusiones, más de las primeras que de las segundas, que a veces conlleva el blog, como cualquier otro proyecto en la vida, entre otras cosas. Y el domingo volvemos a contar con una historia de El Argonauta, titulada "CUARTO MUNDO", y trata con gran sensibilidad el mundo de los marginados y la acción de Cáritas con ellos.

Por Cástor y Pólux.

INTRODUCCIÓN. LA UNIÓN CON NUESTRO ENTORNO.

Cada molécula de aire se agita imperceptible a nuestro alrededor. Nos rodea, va y viene, y en cada movimiento parece que se alejará lo suficiente para que nunca vuelva a rozarnos. Pero se arremolina con el vaivén de una corriente y nos presiona la piel chocando contra sus poros, por donde puede perfectamente entrar, aunque no lo hace. Pero el juego del azar le permite ascender a la vez que abrimos la boca y, exhaustos por algún esfuerzo, inspiramos con fuerza introduciendo en nuestro cuerpo esa molécula que nos acechaba junto con otros millones iguales. Esa molécula era una molécula de oxígeno (O 2 –el 2 como subíndice-), dos átomos de oxígeno unidos formando una molécula (el oxígeno atómico –con propiedades bactericidas- es inestable y tiende a unirse en una molécula con dos átomos –en esas propiedades se basa el agua oxigenada para limpiar y curar heridas-).

Ya en nuestros pulmones, después de recorrer la tráquea y los bronquios, la molécula de oxígeno acabará formando parte del torrente sanguíneo, cumpliendo una función muy específica, abastece de energía las distintas partes del cuerpo. Nuestro organismo depende totalmente del entorno en el que se desenvuelve, hasta el punto de que ha evolucionado utilizando en una simbiosis perfecta los elementos de su entorno. Somos organismos tan dependientes de ese entorno que aún repitiéndose los mismos parámetros que lo definen difícilmente evolucionaría un organismo parecido a nosotros.

El ciclo circadiano marca y somete nuestras vidas. Las salidas al espacio ingrávido nos han enseñado cómo nuestro organismo depende de la gravedad en la que ha evolucionado. Necesitamos literalmente comernos nuestro entorno para seguir viviendo. Estamos tan adaptados a nuestro medio que somos parte de él.

Os adelantamos que esta fin de semana tendremos artículos el sábado y el domingo. El sábado Pólux nos contará algo sobre la historia de Obtentalia, y el domingo podremos disfrutar de una nueva historia de El Argonauta, viajero incansable y contador de historias.

Por Cástor y Pólux.

INTRODUCCIÓN. EL PRESENTE, NEXO CON LA REALIDAD.

Las mañanas ya van siendo más frescas, al menos desde nuestra atalaya así nos lo parece. La Tierra sigue inexorable su recorrido a través de su levemente inclinada órbita alrededor del Sol. Sólo nos queda alegrarnos por tener un día más, para disfrutar, para reír, para desear… para vivir. Mañana será otro día, pero hoy, sólo hoy, podremos cambiar el mundo.

El ahora es la mayor y más poderosa arma que tenemos para actuar en el mundo, modificarlo y mejorarlo -y también empeorarlo-. Cada instante es único y juega a nuestro favor, pues constantemente nos da la posibilidad de mejorar y superar limitaciones. De hecho el presente es lo único que tenemos, pero es también todo lo que necesitamos, es el mayor don. Vivir a gusto es el mejor regalo que podemos hacernos, por eso es tan importante estar en paz con uno mismo. El futuro es ensueño, el pasado inútil recuerdo, y el presente nuestro único nexo con la realidad.

El sol ilumina cada vez más el horizonte, el mar va adquiriendo el tono azul que le es propio, la últimas farolas se van apagando, el trino de los pájaros llena el espacio ... Ha comenzado un día nuevo. Tenemos un día mas para vivir.

Por Cástor y Pólux.

INTRODUCCIÓN. POR FIN NUBLADO Y UN COMENTARIO.

  Por fin un día que amanece nublado por estas latitudes. Nos va apeteciendo un poco de fresco y no tanto calor. Por apetecer nos puede apetecer lo que queramos, que ya luego la naturaleza será. Después de años y años seguimos queriendo que los hechos naturales se adapten a nuestros deseos, a pesar de que la experiencia acumulada en ese tiempo nos aclara una y otra vez que no es así.

  Queremos saludar desde entra introducción a Ximena, fiel seguidora de las historias de El Argonauta. Ha dejado un comentario en la página de "El Argonauta" -hay que llegar hasta el final de la página-. Ayer domingo se quedó esperando la historia de dicho colaborador que habitualmente publicamos ese día de la semana. Lo sentimos mucho Ximena, que más nos hubiera gustado que tener una historia suya, y seguro que a él también -nosotros nos reconocemos asiduos lectores de sus historias-. Pero nuestros colaboradores escriben según pueden y sus otros quehaceres se lo permiten. Sabemos que tenía una historia, pero no llegó a tiempo para publicarse. Ten en cuenta que quienes hacemos Obtentalia no estamos dedicados de lleno a esto, y, a veces, por falta de tiempo, tenemos que planificar con demasiada antelación los artículos a publicar. De todas formas, estimada Ximena, procuraremos en lo posible no volverte a dejar un domingo como el de ayer, "compuesta y sin novio".

  Por otro lado, Ximena, ya vemos por tu nombre que eres mujer. El uso del masculino que hicimos para referirnos a ti no implicaba la suposición de que eras hombre (pues no sabíamos si eras hombre o mujer), tan sólo era el uso que permite la gramática del género masculino como no marcado o inclusivo (incluye genéricamente al femenino) frente al género femenino como marcado o exclusivo (excluye al masculino). Sé que la tendencia actual es la de marcar los dos géneros, pero esa es otra historia que no viene ahora al caso.

  Un saludo Ximena. También comentaremos algo en la página de El Argonauta, tras tu comentario.

Por Cástor y Pólux.

INTRODUCCIÓN. EL DEVENIR Y LA OBLIGACIÓN DE VIVIR.

Fluye el devenir y como a incautos nos atrapa. Queremos, pero no podemos, miramos pero no vemos, imaginamos pero sólo imaginamos … Corramos o no nos atrapa su eterna presencia, su continuo estar, su inevitable ser. La contingencia de sus actos le hace imperceptible, pero actúa en cada instante de nuestras vidas. Cerramos los ojos pero no desaparece, los abrimos y no lo vemos. ¿Acaso no es esa también la definición que se da de Dios? ¿No podría ser Dios, simplemente, el devenir? Los demás atributos ya se los añadimos nosotros, muy dados a poner nombre a las cosas.

Hoy es lunes, día de inicios para la mayoría. Y septiembre, mes de retornos. Retorno a la escuela, al trabajo, a la rutina que la vida y nosotros mismos nos hemos impuesto. Retornos a la vez impuestos y deseados.

Quisiéramos correr desnudos desde nuestra atalaya hacia la playa, y que una inesperada ola nos atrapara para siempre y nos hiciera mar. Quisiéramos que nada o nadie nos hubiera apartado del rígido camino animal que el instinto marca, pero ese algo o alguien está experimentando con nosotros, nos da voluntad y deseos pero nos pone límites, nos da esperanza e ilusión, pero nos impone desgracias y sufrimiento, nos abre los ojos a la vida, pero nos la impone sin concesiones.

Las cosas no son buenas ni malas, es nuestra interpretación de ellas lo que las convierte en buenas o malas.

Esperamos que esta semana sea buena, al menos en algún sentido, para todos.

Por Cástor y Pólux.

INTRODUCCIÓN. PÓLUX Y LA RUTINA, LA VIDA, ¿VOLUNTAD U OMISIÓN?

  Hoy  domingo os presentamos un comentario de Pólux sobre la rutina. Trata de acotar un poco el término y ver sus pros y sus contras. Lo podéis leer tras esta entrada y en su página "El comentario de Pólux".

  Como veis volvemos a estar un día más con vosotros. Y ¿cómo lo hacemos?, ¿por voluntad propia o por omisión?  Para el hecho físico de vivir no hay que ejercer ninguna voluntad, tan sólo omitimos cualquier acto en contra, nuestro instinto de supervivencia nos induce a actuar así. Para el hecho personal, social y racional de vivir también funciona la omisión, pero para adaptar esa vida adaptable a nuestros deseos hace falta voluntad propia, esfuerzo. Y ahí comienzan los problemas.

  La adaptabilidad en el ser humano no es algo dependiente estrictamente del instinto, como en los demás animales. Por suerte y por desgracia nuestra adaptabilidad puede y tiene que ser inventada, creada. Eso produce más versatilidad, más capacidad, más posibilidad, pero requiere más esfuerzo, más agotamiento, más cansancio. Y no podemos elegir. Somos presa de nuestra naturaleza, para bien y para mal.

  Nuestro instinto nos lleva a aceptar la vida sin más (si no, como especie, seríamos una ruina sin futuro), y eso nos obliga. En ocasiones el cansancio nos lleva a no aceptar esa obligación, y terminamos en una situación aparentemente contradictoria que nos confunde. Así en nuestra naturaleza, confusa, pero también clara. Lo difícil es saber aclararnos cuando estamos confusos y no confundirnos cuando algo nos aparece claro. Pudieran parecer situaciones contradictorias, pero sólo aparentemente, porque como ya hemos dicho en varias ocasiones, y lo seguimos manteniendo, la contradicción real no existe, tan sólo existe en nuestro pensamiento, por la forma en que planteamos las cuestiones.

Por Cástor y Pólux.

"LA RUTINA", por Pólux.

"LA RUTINA", por Pólux.

A veces la rutina nos parece gratuita e inútil. Repetimos actos de forma continuada instados por cierta inercia irrefrenable. Parecen comportamientos sin un esencial sentido o al menos no sujetos a una previa reflexión.

Sin embargo cumplen una función muy importante en el desenvolvimiento de los seres animales en su entorno, y de nosotros mismos como pertenecientes a esa misma categoría.

Hace tiempo todas las mañanas tomaba el mismo tren de cercanías para ir a trabajar. Tomaré este hecho como ejemplo. Los trenes de cercanías son frecuentados por las mismas personas y en los mismos horarios. Sus deberes les suelen obligar a ello. Ahora bien los asientos que escogen para sentarse (cuando pueden hacerlo), no les son impuestos, y sin embargo la gran mayoría de los pasajeros toman los mismos asientos una y otra vez, de forma rutinaria.

Cuando se advierte esa rutina parece sin sentido y caprichosa, descubriendo posteriormente con sorpresa que uno mismo la sigue cada día.

Para cualquier animal la rutina implica seguridad.

Si un animal en la selva recorre un mismo camino sin incidencias para ir a una charca a beber, tenderá a hacerlo siempre por ese mismo lugar porque le dará la seguridad de saber que es un camino seguro, y podrá establecer la rutina de ir por ese lugar cada día. La rutina de los usuarios del tren de nuestro ejemplo funciona de igual forma, si nos sentamos en el mismo sitio sabemos si bajaremos antes o después, si nos molesta o no la gente que nos rodea, etc., es decir, la rutina nos hará afrontar sin estrés, por el conocimiento que hemos adquirido, la situación de coger el tren e ir a nuestro destino. La función que cumple es clara (obtener seguridad y rendimiento repitiendo determinados actos). Ahora bien, cuando la situación no requiere de los beneficio de la rutina, entonces ésta se convierte en algo inútil y sin sentido, adquiriendo el aspecto negativo bajo el que solemos usar la palabra rutina. A este tipo de rutina sin razón le podríamos llamar manía (no en su significado psiquiátrico o clínico, sino en su significado más simple de uso común). Pienso en las personas mayores, como por ejemplo cuando alguna quiere comer siempre a la misma hora y no admite un retraso de cinco minutos. Una de las características más comunes de la vejez es precisamente la falta de adaptabilidad (aunque en la vejez no todo son características negativas), lo que lleva a esas rutinas sin sentido que hemos llamado manías.

Todo puede ser positivo cuando se da en su justa medida, sin excesos ni extremismos, y eso mismo sucede con esa forma de hacer las cosas que llamamos rutina.