Ayer, observando los pinos desde nuestra atalaya, sentimos un gran desamparo. El viento movía la copa de los pinos en una especie de baile organizado cuyos únicos espectadores éramos nosotros. Sólo nosotros tenemos consciencia para saber lo que está sucediendo, para saber que están siendo movidas por la brisa. ¿Por qué no podíamos ser nosotros los pinos?, vivos pero ajenos, inconscientes, sin elección posible. No seríamos lo que somos, pero tampoco eso parece que importe mucho. Nadie ha pedido ser lo que es, sólo se alegra de serlo porque no conoce ni puede ser otra cosa. Somos presa de nosotros mismos, nuestro cuerpo es nuestra propia cárcel, y la conciencia una especie de castigo natural, la crueldad de una naturaleza juguetona, que nos hace ser quien no queremos ser y desear lo que no tenemos.
Pero en realidad no existen ni el castigo natural ni la crueldad de la naturaleza, sólo existe nuestra interpretación de todo ello. Por eso el problema, el único problema, es nuestra existencia, que se nos antoja una carambola natural que no sabemos explicar. A cada paso que damos todo pierde más su sentido, o el sentido que hemos querido ver en las cosas, en la existencia, en la vida. Este sentimiento de pérdida es lo más real que hemos sentido en mucho tiempo y por ello seguimos aún aquí en nuestra atalaya, solos, perdidos, con el deseo ausente, la voluntad anulada y la mirada perdida.
Pero volvamos, hoy sábado, a los contenidos del blog del fin de semana. Hoy tenemos un nuevo comentario de Prometeo, que siempre se acuerda de nosotros cuando va al cine, y a quien siempre leemos antes de ir nosotros. En esta ocasión comenta una película que lleva ya varias semanas en cartelera. Se trata de "Jack el cazagigantes", una adaptación libre del famoso cuento de las habichuelas mágicas. Podéis leerlo accediendo desde su título escrito, tras esta entrada, en su página "La película de Prometeo", o en el enlace directo en "Últimos contenidos".
Y mañana domingo disfrutaremos de un nuevo artículo de Adonis, quien domingo tras domingo nos brinda sus inigualables fotografías y sus comentarios, reflexiones e ideas. Su página va aumentando semana tras semana, así que a aquéllos que no hayáis leído todos sus artículos os recomendamos que entréis en su página "La mirada de Adonis" y paséis un rato agradable, entretenido y productivo leyéndolos. Su artículo de mañana se titula "Músicos del Mundo", y vuelve con un retrato que ..., pero eso mejor lo leemos mañana, que ya lo explica él muy bien.
Sigue cada día transitando el tren y haciendo su parada en nuestra estación, hasta hoy ..., mañana se volverá a sortear la lotería de la vida y a ver qué nos toca. No es fatalismo, es el compromiso de aceptar lo inevitable.
Sigue cada día transitando el tren y haciendo su parada en nuestra estación, hasta hoy ..., mañana se volverá a sortear la lotería de la vida y a ver qué nos toca. No es fatalismo, es el compromiso de aceptar lo inevitable.
Por Cástor y Pólux.