Bienvenidos a este domingo y a Obtentalia. Nosotros, como podéis ver, pudimos finalmente tomar el tres y hemos llegado. Un día, sólo un día ..., por ahora la vida sólo nos ha renovado la "póliza de vida" por un día. Así que intentaremos no desperdiciarlo.
La novedad que os presentamos hoy es la que venimos anunciando hace ya varios días. Se trata de un nuevo relato de Argonauta, "Cuba libre". Ayer ya lo presentábamos y decíamos que había algo novedoso en su relato, aunque no especificamos el qué. Pues bien, eso novedoso es que intercala en su relato varias poesías. Sin duda os gustará. Nos habla además de primera mano de conocidos personajes del mundo de la cultura cubana, a quienes conoció personalmente. Desde el director y guionista de cine Arturo Sotto al músico y cantautor Pablo Milanés, pasando por el actor de cine y teatro (y no sólo actor) Jorge Perugorría.
De Arturo Sotto es conocida, entre otras, la película que cita en su relato, la premiada "Amor vertical", nominada además a los premios Goya como mejor filme extranjero de habla hispana, la también premiada "Pon tu pensamiento en mi" y la más actual "La noche de los inocentes".
De Pablo Milanés, uno de los fundadores de la llamada "Nueva Trova Cubana", ¡cuántas canciones inolvidables! Nosotros nos quedamos con "Yo no te pido", que a finales de los años setenta conmovía con su música y su letra a una España en cambio.
De Jorge Perugorría tal vez conozcáis, entre otras muchas películas, "Fresa y chocolate" o "Che", protagonizada por Benicio del Toro. También intervino en "Amor vertical" que, como relata Argonauta, estaba acabando de rodar entonces Sotto, y en "La noche de los inocentes", también de Sotto, a la que antes no hemos referido al habar de éste.
Podréis encontrar a estos personajes entre los que aparecen en las fotos personales que el propio Argonauta nos ha enviado para ilustrar el relato. En fin, vemos que no perdió el tiempo.
Encontraréis su relato tras esta entrada o en su página "Argonauta". También podéis enlazar desde los títulos móviles que anuncian su relato.
No sabemos si en tierras cubana, por alguna referencia o por simple casualidad, alguien ve este blog, pero por si es el caso les mandamos un fuerte saludo.
Queremos hablaros ahora de la galería de fotos. Cometimos el error de numerar dos tandas de fotos de igual manera, es decir, había dos fotos para cada número que la identificaba. Esperamos que no haya supuesto un especial obstáculo para comentarlas. Ya lo hemos solventado. De los comentarios que hemos recibido, que podéis ver al final de la página "Galería de fotos de Obtentalia", resulta que la foto que más ha gustado ha sido la número quince, seguida de la número 8. Así que proclamamos como ganadora la número 15 y como segunda la número 8. Como reconocimiento estableceremos por ahora la foto número 15 como foto de Obtentalia. Y por eso la usamos hoy como foto de portada de nuestro blog. El fin de semana que viene pondremos la foto número 8.
Podéis seguir votando las fotografías que os parezcan más interesantes. A decir verdad, nos hubiera gustado algo más de participación. Tal vez hubiera cambiado el sentido del voto. Esperamos más votos, por eso antes, al establecer como foto de Obtentalia la número 15 hemos dicho "por ahora".
Ayer publicamos un artículo de Pólux, titulado "Psicología popular", al que os remitimos como nuevo contenido de este fin de semana.
El martes pasado hicimos una introducción que titulamos "Desahucios y demagogia". Un amable visitante lo ha comentado y proponía la insumisión pacífica como camino para hacerle ver a nuestros políticos el descontento general. Creemos que tal vez tenga razón, que hemos llegado a un punto en que hemos de decir ¡basta ya! El problema es que los políticos entienden las señales que se les envían como les interesa. Como ejemplo diremos que cuando en unas elecciones baja la partición de forma alarmante, los políticos no se dan por aludidos, y si alguno dice que se debe al descontento del pueblo con ellos es sólo cara a la galería, porque después realmente no se hace absolutamente nada para evitarlo. Sólo están consiguiendo un mayor descontento general. Y gracias por el comentario, las ideas de los demás ayudan a perfilar las nuestras.
Queremos tener esperanza en el futuro, y ni los políticos, la crisis, la soledad, el descontento, el estrés, la rutina, las deudas o la falta de horizontes nos la quitarán. Sólo hay una cosa que nos robaría la esperanza en el futuro, pero no vamos a decir de qué se trata, acaso por nombrarla crezca y se reproduzca.
Por Cástor y Pólux.