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No sé si mirar arriba, adentro o abajo, porque lo que encuentro frente a mí es más de lo mismo, de lo mismo que yo soy quiero decir. ...

sábado, 12 de septiembre de 2015

NOSTALGIA QUE ME BUSCAS.


El mar calmo brilla a poniente, con el sol ya bajo abriendo un camino dorado de nostalgias perdidas y deseos inacabados.

Aún hiriente quisiera recorrerlo una vez más para luego olvidarlo.

Olvido, requiebro al tiempo y a la memoria, atajo que ciega el corazón y acalla sus latidos, que donde vive muere, que donde siente niega, que donde fue dejó de ser...

No te busco, nostalgia, que me buscas tú, sí. Me encuentras cuando te huyo, me miras cuando te niego, me posees cuando te olvido...

Por Pólux.


viernes, 11 de septiembre de 2015

ALGO MÁS SOBRE LA PARÁLISIS DEL SUEÑO.


Ya he hablado en dos ocasiones (en dos entradas) de la parálisis del sueño, esa incapacidad transitoria para realizar cualquier tipo de movimiento voluntario que tiene lugar durante el periodo de transición entre el estado de sueño y el de vigilia, y mi propia experiencia personal al respecto.

Antes de seguir, y si aún no lo han hecho, sería conveniente que leyeran las dos entradas sobre el tema en este blog a modo de introducción, sobre todo si no han oído hablar de la parálisis del sueño o no saben bien qué puede ser. Dichas dos entradas son las siguientes:

En la primera de dichas entrada decía literalmente lo siguiente: "Suele suceder, no siempre, que hay una especie de mezcla entre el inicio de una representación onírica (un sueño) y la realidad (aún se está despierto), lo que lleva a sentir ese sueño como una "presencia", algo real que se percibe como extraño."

Desde la última de dichas entradas ha vuelto a sucederme en una ocasión más, en la que he tenido por primera vez esa sensación de una "presencia extraña", que como ya sabemos no es más que la percepción, en ese estado alterado entre el sueño y la vigilia, del inicio de un sueño o simplemente de una percepción sensorial que es interpretada por nuestra mente de forma igualmente alterada.

E insisto (ya dejé clara mi postura en dichas entradas) en que a pesar de la sensación tan irreal y extraña y de la angustia que puede llegar a producir, en ningún momento me ha parecido algo extrasensorial, ni el susurro de un muerto que pasaba por allí o la manifestación de un mundo de espíritus que invade mi cuerpo.

La explicación es mucho más sencilla (en dichas entradas se refiere con detalle), pero para muchas personas (algunas con mala fe) es más fácil creer en una historia fantástica y extraña que en una idea racional y real, como si la realidad no fuera suficientemente satisfactoria y se hubiera de recurrir al "más allá", algo que está tan allá que, no pudiendo saber nada de ello, podemos imaginarlo todo.

Y por último sólo decir que busquen más información si les interesa, pero por favor no lean lo primero que caiga en sus manos, ya sabemos que internet es un campo baldío donde se encuentra de todo, y por desgracia mucha información falsa o poco rigurosa.

Por Pólux.


jueves, 10 de septiembre de 2015

CONJUNCIÓN LUNA-VENUS (Y MARTE) Y EL DÍA LLEGÓ.


Puntas o cuernos de la Luna
Anoche, en realidad esta mañana muy temprano, hubo una conjunción astronómica muy llamativa, tal vez de las más llamativas que puedan verse a pesar de su simplicitud, pues sólo intervenían la Luna y Venus, y la verdad es que también Marte un poco más alejado. Y resultaba llamativa por la fase de la Luna, apenas un 9,87 % iluminada, y el fuerte brillo de Venus. Además, esta mañana, bien temprano, Venus estaba exactamente en la prolongación de la línea de unión de las dos "puntas" de la Luna (ver foto adjunta).

Por si alguien tal vez no lo recuerda, una conjunción planetaria, con la Luna en este caso, se da cuando dos o más planetas, incluida la Luna, aparecen muy cerca en el cielo (normalmente no lo están). Se trata en realidad de un efecto de perspectiva, pues tienen aproximadamente la misma longitud celeste pero distinta latitud. Es como cuando miramos al cielo y vemos pasar un avión por detrás de una antena de televisión. Mientras pasa por detrás parecen estar juntos, pero sólo lo parece por el efecto de la perspectiva, pues el avión está a mucha más distancia que la antena.

Desde la atalaya de Obtentalia, aquí sobre los acantilados terrosos de la costa menos desarrollada de Huelva, mirando al mar y Coto de Doñana, lejos de todo, y bajo la única influencia del interés por el conocimiento, la visión de la conjunción planetaria me ha maravillado y ha avivado ese interés y la necesidad de búsqueda. ¡Qué espectáculo de brillos sobre el fondo de estrellas!

Luego amaneció y llegó el día de hoy, fresco, lozano, despejado, desafiante con sus secretos, y el mar, calmo, suave y azul, muy azul, como sólo él lo puede estar, aún más desafiante en su simpleza con sus secretos.

Y el día llegó...

Por Pólux.


miércoles, 9 de septiembre de 2015

ALTRUISMO.


¿A cuánto renunciamos por los demás, por la persona que apreciamos, que queremos? En muchos casos, estoy seguro, más de lo que pueda imaginarse esa persona.

A pesar de nuestro egoísmo innato somo capaces de dar mucho y hacerlo en silencio, sin pedir ni necesitar ningún reconocimiento.

Eso es altruismo. Y no hay que ser valeroso, ejemplar, religioso o especialmente inteligente para actuar así.

A pesar de mi poca fe en el género humano, o tal vez por ello, me alegra encontrar personas así, con sus defectos también, pero capaces de dar algo de sí por el bien de otros. Ni siquiera es necesario hacerlo en nombre de algo más que el aprecio por la vida ajena.

Por Pólux.


martes, 8 de septiembre de 2015

POESÍA DE JUAN RAMÓN JIMÉNEZ.

POESÍA DE JUAN RAMÓN JIMÉNEZ

COMO ME MIRAS... POR SI YO PUDIESE

Pajarillo cojido, de tu pecho dulce 
por el águila negra de la muerte, 
¡cómo me miras con tu ojito triste! 
(negro plenor sangriento de luz débil). 
Desde debajo de la garra inmensa, 
que para siempre ya le tiene 
y afirmado, mientras la desafía 
la vasta sombra que su vista emprende. 
¡Cómo me mira sin pedirme nada, 
cómo me mira... por si yo pudiese, 
que ya te está teniendo para siempre!


lunes, 7 de septiembre de 2015

MIDIENDO EL NIVEL CULTURAL.


El nivel cultural medio de un pueblo es directamente proporcional al número de órganos genitales masculinos dibujados en los cristales sucios de los coches aparcados en sus calles.

Que pena me decir eso, sobre todo por lo que toca a mi pueblo, aunque tampoco es que me importe demasiado, qué le voy a hacer.

La gracieta de unos niños aburridos, dicen alguno, pero no sé, no sé..., hay algo más, y no especialmente atractivo, en el subconsciente de los sujetos que los pintan, sin duda.

Por Pólux.



domingo, 6 de septiembre de 2015

"INMIGRANTES Y REFUGIADOS", POR PÓLUX.

INMIGRANTES Y REFUGIADOS
Por Polux (6 de septiembre de 2015)


No puedo dejar de comentar, o al menos de hacerme eco, de la corriente de refugiados que la guerra en parte de Oriente Medio y otros países está generando, un verdadero éxodo.

Pasamos las dos grandes guerras europeas y creímos que ya lo habíamos visto todo, que el horror y la barbarie que subsistió en la memoria de todos y de las generaciones posteriores sería suficiente para no repetir las atrocidades y todo el daño causado.

Después llegó la guerra de los Balcanes, o mejor de la antigua Yugoslavia, para diferenciarla de la ocurrida a principios del siglo XX, donde se volvió a repetir la represión y el odio entre etnias.

Y ahora volvemos a lo mismo. Siria, los Yihadistas, Irak, Afganistán, Ucrania,y no sé ya cuantos países africanos... No, la memoria no evita la reincidencia.

Quienes huyen tienen la más poderosa de las razones, la de evitar la muerte o el riesgo real de muerte, la propia y la de sus familias. ¿Cuán no habrá de ser la situación para renunciar a todo, en el país y el pueblo del que son hijos, para aventurarse en un incierto y peligroso viaje abocado al fracaso?

Nuestra visión como países receptores es bien distinta. Parece ser que nuestro problema es como asumir tanta inmigración sin que peligre nuestro estado de bienestar. Opiniones las hay para todos los gustos, muchas de la cuales, según he escuchado, apelan a la resolución del conflicto en origen. Pero creo que esto no es atajar con realismo el problema. Para atajarlo en origen o se termina con la guerra, y a ver si hay alguien que me dice cómo se hace eso, o le levanta un muro de treinta metros de altura con alambre de espino para que no salga nadie de su país. Cualquiera de las dos soluciones no arregla el problema real que se plantea en Europa, el de acoger una avalancha de refugiados. Ese es nuestro problema inmediato, y al que hemos de dar solución independientemente del origen de esta situación.

Una sociedad con recursos y desarrollada no puede dar la espalda a un problema así. Puede que económicamente nos debilite y socialmente nos incomode, pero no podemos hacer otra cosa más que acogerles, pues la otra opción es olvidarlos a su suerte hasta que mueran de alguna enfermedad o inanición. Claro que caben soluciones intermedias, como hacer campos de refugiados, pero sigo diciendo que eso es darles de lado y vivir con la creación de guetos para que no manchen nuestras calles. Es sólo mi opinión y lo que creo.

Por otro lado, una "ola" de solidaridad ha recorrido Ayuntamientos y Municipios de nuestra geografía española, dispuestos a acoger y ayudar a quien haga falta. Por supuesto que eso es lo más honroso, pero que pena que no hayamos sido tan honrosos con la inmigración (también refugiados en muchísimos casos) sudafricana que tanto años lleva inundando nuestras calles y nuestros semáforos, malviviendo en chabolas sin agua corriente ni la más mínima salubridad.

Campo de refugiados.
A ver si al final va a pasar como sucede con los Impuestos en España (y perdonen la frivolidad de la comparación), pero si no tienes hijos, ni hipoteca, ni eres menor de veinticinco años, parado o discapacitado y no sé cuántas cosas más, no hay desgravación que valga. Vamos, que si eres soltero, sin hijos y te compraste un pisito, pagas lo que no paga nadie. Pues igual, si eres tal o cual refugiado puede que recibas ayudas, pero si pasaste en patera jugándote la vida para huir de un país africano en guerra, molestas hasta en los semáforos.

La necesidad no es más que una, y la conciencia para ayudar también. Los problemas no se resuelven satisfactoriamente afrontándolos cuando están encima y sus efectos ya hacen daño. Pero qué le vamos a hacer, la memoria, estoy seguro, de nada servirá y tarde o temprano la situación se volverá a producir. Ahora hay que tomar medidas inmediatas y comenzar con medidas preventivas realistas y prácticas, pero dudo que éstas se planteen con la suficiente seriedad.

Acabar con el problema de la inmigración y el éxodo de refugiados es tan difícil como acabar con las propias guerras que los generan, pero al menos hemos de acabar con el problema que tenemos en nuestras puertas, aunque la solidaridad para hacerlo nos cueste más de lo quisiéramos dar. Sólo pienso que un día podía ser yo quien tuviera que huir a una tierra desconocida. Y no es una idea tan descabellada. España ya tuvo su propia guerra civil  y sus refugiados.