Restos de un barco sobre el suelo fangoso, cerca de una ría, lo que queda de un pasado que tal vez viva en alguna memoria, no en la nuestra, esa es la foto de hoy de cabecera de nuestro blog, de Obtentalia. ¿Testigo de cuántas historias, algunas probablemente decisivas para alguien, fue testigo ese barco en su momento de esplendor?
Imagen certera de una realidad que a todos nos preocupa, pero que no todos pensamos. La satisfacción y el gozo por la vida no puede estar acompañada constantemente por imágenes de decrepitud, por imágenes recordatorias de lo más penoso. Cada cual hace lo que puede para dar la espalda lo más efectivamente posible a lo que molesta. Suele ser así, nos pasa a casi todos.
¿Qué restos quedarán de nosotros?, ¿y de nuestra atalaya?, ¿y de Obtentalia? Todo se perderá pronto, casi seguro que antes que los restos del barco de la fotografía de hoy. Pero a nosotros no nos importa eso demasiado. Lo inevitable no es un problema.
Y feliz entrada del mes de junio, mes primaveral y veraniego, único del año que cumple ambas condiciones.
Y feliz entrada del mes de junio, mes primaveral y veraniego, único del año que cumple ambas condiciones.
Por Cástor y Pólux.
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