Mirando hacia la Maestranza
Por Adonis (03-03-2013)
Fotografía del autor. |
A las puertas del Puente de
Triana, rodeada por el Guadalquivir, se
encuentra esta escultura fabricada en bronce por Venancio Blanco. Con cabeza
erguida, mirada lejana y estampa de faquir con mentón prominente, se recorta la
silueta inconfundible de Juan Belmonte. Monumento
que Sevilla dedica a su hijo predilecto.
“Con esta fotografía que publico hoy pretendo contar y transmitir las
emociones que me transmite” el
semblante de esta estampa del Pasmo de Triana.
Extraña figura envuelta por una
leyenda llena de dramatismo y arte que ayudaba a divulgar su popularidad, fuera incluso de su ambiente,
transformándole en ídolo sobrepasando su propio final.
Gerardo Diego le dedico la “Oda a
Belmonte”.
Yo canto al varón pleno,
al triunfador del mundo y de sí mismo
que al borde, un día y otro, del abismo
supo asomarse impávido y sereno.
El escultor necesita inspiración
y habilidad, esculpe lo que siente y lo expresa en arte. Aquí ha dejado plasmado al hombre duro y
audaz, triste, solitario y cansado de emociones y de años. A través del pecho
de la escultura, en vacío, se puede divisar parte de Sevilla, y particularmente
la Giralda, llenando ese hueco que a posta ha dejado el escultor para ocuparlo
con la ciudad que admiraba a este mito a modo de retrato de su grandeza de
corazón.
La magia de la fotografía en blanco
y negro, con un solo objeto y ausente de
color, difunde mas fácilmente la textura, el volumen, las líneas y la forma, para no distraer
la atención del espectador, buscando la máxima expresividad y dejando impresa la identidad del personaje,
que a igual que Él da pie a una imagen profunda, expresando agresividad, dureza
o también melancolía de una vida que terminó en negro.
No estaría mal que me lo dijeras.
Puedes dar tu opinión técnica,
tus sensaciones, o simplemente si te gusta o no.
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