EL ANIMAL CONSCIENTE.

Hoy no podemos presentaros el ya habitual artículo sobre música que cada domingo nos prepara nuestro colaborador Francisco García. Son varias las causas que han impedido tenerlo justo para hoy.

Cualquier animal, como el de la fotografía de hoy (que reproducimos seguidamente), hace de la subsistencia y la perpetuación la finalidad de su existencia en esta vida.

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Pero el animal hombre sobredimensiona sobre esa finalidad, al tener autoconsiencia y poder valorar con ella su posición no sólo en la realidad inmediata en que se halla, sino en las posibilidades futuras de esas realidades inmediatas.

Ello da una perspectiva que guía nuestros pasos poniendo un pié en la realidad inmediata y el otro en la probabilidad futura, trascendiendo así aquélla y abriendo la posibilidad de que ésta sea continuo acicate del anhelo humano de ir siempre un poco más allá.

Así el hombre no sólo descubre, también coloniza; no solo construye, también destruye; no solo anhela, también se hastía; no sólo se ríe, también juzga; no solo se sorprende, también se olvida ...

Algo en nuestra naturaleza nos ha permitido ir más allá de la subsistencia y la perpetuación, hasta el punto de disponer de lo inmediato, modificar el entorno e incluso manipularlo a nuestro favor.

Por Pólux.