Otro lunes. Más trabajo. Felicidades a quien esté de vacaciones. Los demás estamos aquí, pasando calor, y lo que es peor, trabajando día tras día en esto que hay quien considera que es una bendición. Bueno..., hay que ganarse la vida, y gracias damos todos los trabajadores a poderlo hacer con nuestro trabajo, pero de ahí a que sea una bendición...
Pocas personas, muy pocas, conozco que disfruten con su trabajo, sobre todo cuando se es empleado de otro, porque a falta de responsabilidad mayor carga de rutina, falta de valoración y rigidez horaria. Lo hacemos seguramente porque no sabemos hacer otra cosa.
Doy gracias por trabajar y poderme ganar la vida, pero no las doy por tenerme que ganar la vida trabajando.
Por Pólux.
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