¿Qué nos hace estar día tras día aquí en nuestra atalaya, a pesar del frío o del calor? No es un lugar cómodo ni de acceso fácil. ¿Acaso lo que buscamos aquí no podemos encontrarlo en otro sitio? Posiblemente, pero qué más da, éste fue el lugar elegido y es válido. ¿Acaso no íbamos a estar igual de solos en otro lugar?
Nos aislamos para ser encontrados, pero hay quien dice buscarnos, nos tiene delante y no nos ve. El mundo de lo sólo hablado tiene mucho de farsa. El mundo de la comunicación, las redes sociales, internet ..., es todo una farsa, la de la pura apariencia, la de mostrar sólo lo que nos interesa.
Y nosotros, entonces, ¿qué hacemos en nuestra atalaya? Quien no se imagine una respuesta que apague el ordenador, o que salga de este blog, porque en el fondo no le interesa.
Buscando, nosotros siempre estamos buscando, a pesar de creer que nunca encontraremos. Como nos decía Orfeo en su canción "Buscando", "Tras de ti buscando voy, tras de ti, la verdad que no hay".
Buscando, nosotros siempre estamos buscando, a pesar de creer que nunca encontraremos. Como nos decía Orfeo en su canción "Buscando", "Tras de ti buscando voy, tras de ti, la verdad que no hay".
Por Cástor y Pólux.
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