Las culturas y las religiones son órdenes sociales relativos, pues se circunscriben a los parámetros de tiempo y circunstancias históricas que los conforman, aunque pretendan ser universales.
La diferencia de culturas es evidente, y lo sentimos cada vez que vemos noticias sobre algún hecho sucedido en otra cultura que no entendemos y nos "choca".
Con las religiones sucede un tanto igual. Siendo la idea de Dios la de omnipotencia, verdad absoluta, omnipresencia, todopoderoso, eterno, inmutable, indivisible, bondadoso, infinito ... y un largo etcétera, no deja de ser curiosa la diversidad de Dioses que existen en las distintas religiones, lo que refleja su carácter relativo a la sociedad histórica en la que nacen.
Que el mensaje de las religiones, muchas con milenios de antigüedad, siga vigente hoy se debe a su carácter generalista y a que apela a aspectos que definen la humanidad (bondad, amor...), y que siguen, por tanto, vigentes. Las culturas suelen renovarse más, las religiones parecen aguantar mejor los anacronismos, pero cada una de ellas tiene su tiempo, tras el cual se han de renovar.
La imparable globalización parece que está abocada a terminar con la diferencias culturales y religiosas, aunque a muy largo plazo.
Por Cástor y Pólux.
No hay comentarios :
Publicar un comentario