A veces todo es fácil, posible, coherente, del color
que nos apetece. Otras difícil, inasumible, filtrado por un cristal oscuro. Como la foto de hoy, que no nos deja ver más allá de la copa de los pinos, que llenan todo el campo de visión. Nos oculta la realidad que hay tras los pinos.
Si evitamos los extremos, tanto de la
euforia como del momento más triste y depresivo que acompañan al carácter ciclotímico, habremos superado una de las
principales causas de distorsión de la realidad. Pero ¿cómo evitar lo que
sucede porque no lo podemos evitar? ¿Con la fuerza de voluntad? ¿Y esa quién
es?
Por Cástor y Pólux.
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