Hace tiempo que dejé de guardarlo todo. Todavía guardo cosas, pero no tanto. Que cosa más inútil. Tengo una alacena llena de todo tipo de cachivaches, pensando que alguno de ellos o sus piezas pudieran servirme algún día. Nada más lejos de la realidad. Sólo tengo una alacena llena a la que tengo que dedicar varios días, y no lo hago, para vaciarla.
¿Qué me ha llevado a guardar tantas cosas que no necesito? Desde luego no es un comportamiento realista, ya que cuando necesite algo lo adquiero y lo tengo nuevo.
Hay una cierto componente melancólico en esto de guardar cosas, como si con ello pudiese retener de alguna forma el pasado. Algo que me fue útil me puede seguir siendo útil. Cuanto más lo pienso más creo que de eso se trata, y de que lo ha sido de una forma inconsciente, ya que de forma consciente hace ya mucho que dejé de pensar en el pasado, de hecho a veces creo que nunca lo he tenido.
Cualquier día, más cercano que lejano, lo tiro todo sin miramientos y rompo mis últimos lazos con el pasado, al que sólo me unirá la edad que tengo. Tal vez tenga algo de obsesivo eso de querer olvidar el pasado, pero es que prefiero ser un obsesivo sin pasado que un obsesivo con pasado.
Por Pólux.
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